Nueve expositores zaragozanos, dos oscenses y uno de Aguaviva (Teruel) constituyen la representación aragonesa en el certamen Almoneda, una feria de antigüedades, galerías de arte y coleccionismo que concita cada año un inmenso interés entre profesionales y público. La feria consta de 228 "stands", abre hoy y exhibirá sus atractivos en el pabellón 10 del madrileño recinto de Ifema hasta el domingo 29 de abril. Se trata de la decimoséptima convocatoria, que nuevamente tendrá el atractivo añadido de la venta directa.
La exposición ofrecerá a los asistentes piezas con un mínimo de 50 años de existencia, como corresponde a la definición de almoneda. También hay obras de arte y objetos de colección sin límite de "edad". Los precios de venta al público van desde un euro a miles, pero puede afirmarse que hay tesoros para todos los gustos y bolsillos. Se pueden hacer hallazgos en ropa de hogar, bisutería de diversas épocas, bolsos, lámparas, relojes o joyas isabelinas.
Lo más barato en Almoneda son unas postales de años 40 y llaveros de coleccionista, ambos por 1 euro, en los "stands" de Anna de la Iglesia y Orno, respectivamente. Consuelo Sierra lleva igualmente pendientes, broches y anillos antiguos, a partir de 5 euros. Lo más caro es una talla de la Virgen, de estilo gótico, por 36.000 euros en Susana Rico.
El anticuario zaragozano Carlos Gil de la Parra ha acudido a Almoneda cuatro años consecutivos. "Es una feria clave en este gremio. De hecho, tras Feriarte, es la segunda de España. La almoneda es la hermana pequeña de las antigüedades, que deben tener más de 100 años. La respuesta de galeristas, expositores y anticuarios de toda España siempre es muy buena".
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