La sede Central de Cajalón en Zaragoza acogerá la exposición de 65 pinturas, dibujos y aguafuertes del pintor aragonés Francisco Marín Bagüés, la mayoría de las cuales pertenecen a colecciones privadas y no han sido expuestas públicamente hasta ahora.
Permanecerá abierta hasta el 3 de diciembre, el comisario de la exposición y catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Zaragoza, Manuel García Guatas, ha calificado al artista como "el mejor pintor aragonés de la primera mitad del siglo XX", ya que supo representar "las costumbres aragonesas".
Las 65 obras expuestas provienen de colecciones privadas de Zaragoza, Madrid, Barcelona y Santander, así como de algunas instituciones públicas de la capital aragonesa. De ellas, 45 son pinturas al óleo, 18 dibujos, seis están realizadas tinta china, y el resto son litografías y aguafuertes.
La exposición está estructurada en tres salas, la primera de ellas dedicada al costumbrismo, "con tintes expresionistas", ha matizado el comisario, y donde se encuentran dos de las obras más representativas del artista, 'El pan bendito' y la 'Carrera de pollos', donde se pone de manifiesto "su obsesión por la captación del movimiento en la forma de plasmar las patas de los caballos", ha explicado García Guatas.
En la segunda de las salas, se exponen una selección de los dibujos, que representan paisajes y figuras, y en la tercera están situados los bodegones.
Marín Bagüés se inspiró para muchas de sus obras en las tarjetas postales del conocido fotógrafo zaragozano Lucas Escolá.
El Aragón romántico y costumbrista se refleja en sus obras.
Francisco Marín Bagüés nació en Leciñena (Zaragoza) en 1879 e ingresó en la Escuela Elemental de Artes Industriales de Zaragoza a las edad de 20 años. En 1908 expuso seis cuadros en la sección de Arte Contemporáneo de la Exposición Hispanofrancesa. De 1909 a 1912 disfrutó de una beca de la Diputación de Zaragoza para completar su formación en Italia, donde entabló amistad con artistas extranjeros y españoles.
En 1916 sufrió una grave crisis de salud mental que cambió su carácter y en los años siguientes redujo su actividad pictórica. A partir de 1921, tras la muerte de su madre, fue su hermana la encargada de atenderle. El mismo año de su muerte, en 1961, el Ayuntamiento de Zaragoza, le organizó un homenaje póstumo en el que también participaron el museo de Bellas Artes y la Diputación de Zaragoza.
Horario Exposiciones: De lunes a viernes de 19 h. a 21 h.
Lugar: Sala de Exposiciones de Cajalón en Zaragoza. Coso, 29
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